Mynor Martínez
El gobierno chino está volcado estos días en la celebración del 80º Aniversario de la Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa y la Guerra Antifascista Mundial, que se conmemorará el próximo 3 de septiembre, para recordar el sacrificio de los 14 años de guerra que cobró la vida de alrededor de 35 millones de personas.
Hasta que uno llega a este país se entera de esta parte de la historia, la cual no se cuenta en occidente, ni en la educación formal, ni en la información en los medios. La mayoría de veces sólo se nos muestra la victoria de los aliados frente a los fascistas nazis en la Segunda Guerra Mundial y de las bombas atómicas sobre dos provincias de Japón, pero se ignoran muchos datos de acciones militares que sacudieron este conflicto.
Sin duda, el mundo de nuestro lado sigue girando alrededor de Europa y Norteamérica, pero el resto del planeta no cuenta en la historia. Los actores de aquel conflicto a escala mundial no están completos o se relega a segundo plano.
Es por ello que cada diez años, en China se recuerda esta gesta con gran importancia, porque con ello concluye un período de su historia de mucho sacrificio, que comienza mucho tiempo atrás, con una serie de invasiones, tanto europeas como de sus vecinos, en lo que ellos denominan el Siglo de la Vergüenza.
Así como Europa y Rusia desarrollan sus actos cívicos y recordatorios de sus víctimas de la guerra, por las atrocidades sucedidas en esa noche obscura de la humanidad, también China hará lo suyo este año con un imponente desfile, al cual se harán presentes alrededor de 26 jefes de Estado y múltiples delegaciones.
Como parte de mi viaje por esta parte del mundo, contaré con la oportunidad de estar presente y experimentar esta actividad histórica, desde la Plaza Tiananmen, en el centro de Beijing.